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Los padres de una niña de cinco años que falleció el 4 de julio de 2018 a causa de un tumor cerebral han compartido imágenes de sus últimos momentos, y estas fotografías han conmovido a muchas personas en todo el mundo. El ejemplo más impactante es uno en el que los padres acunan a la niña, acompañados por el perro de la familia, a punto de fallecer.
A la niña le diagnosticaron un tumor cerebral cuando tenía tan solo tres años. Antes de eso, era una niña alegre y enérgica, siempre en movimiento y muy feliz. Sus padres empezaron a notar que algo no iba bien cuando se quedó dormida jugando. Unas semanas después, todo cambió. La llevaron al hospital, y el diagnóstico de los médicos resultó ser el peor que pudieron haber recibido: su hija tenía un tumor cerebral.
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La niña pasó por momentos muy difíciles y sus padres sufrieron con ella. Fueron dos años de lucha hasta que dejó de responder a la radioterapia y su salud se deterioró rápidamente cada día. Los padres sabían que el momento se acercaba y no podían dejarla sola, así que decidieron invitar a amigos y familiares a despedirse de su querida hija.
Hasta el final, la pequeña fue feliz y contagiaba alegría. Pero el 4 de julio, el día que sus padres más temían, por fin llegó. Su cuerpo, ya frágil y cansado, se rindió ante la difícil lucha. Pusieron la película de Harry Potter y se sentaron en el sofá, acunando con cariño a su hija, que estaba a punto de partir. A su lado, el perro de la familia, sereno y triste, como si supiera lo que estaba pasando.
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A mitad de la película, el corazón de Zoey dejó de latir y falleció. Sus padres se dieron cuenta de que, a pesar de saber que este día llegaría durante dos años, no estaban preparados. La foto fue tomada pocas horas antes de que el corazón de la niña dejara de latir, y fue tomada por una enfermera conmovida por el momento.
La foto se ha difundido y su historia ha conmovido a mucha gente. La familia espera compartir la alegría que Zoey trajo al mundo, inspirar a otros que pasan por lo mismo y ayudarlos a superar el dolor y los momentos difíciles. "Era un ser pequeño que alegraba cada habitación y cada ocasión de nuestras vidas", dijo su madre.