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Cuando tienes niños pequeños en casa, nunca se puede ser demasiado precavido, sobre todo con algunos objetos que pueden ser muy peligrosos para ellos. Stefhany y Brian, una pareja que vive en Tusa, Oklahoma, lo sabían, pero un pequeño descuido bastó para causar la pérdida de su hija de dos años.
Los padres no sabían qué estaba pasando; solo notaron que su hija se estaba poniendo morada y poco después empezó a vomitar sangre. La llevaron de inmediato al hospital. Poco antes del incidente, notaron que su hija tenía fiebre, pero no le dieron mucha importancia, ya que no era alta, pero algo grave estaba sucediendo. Al llegar al hospital, los médicos descubrieron lo que sucedía: la niña se había tragado una batería de litio, como las que se encuentran en relojes, juguetes y muchos otros dispositivos que todos tenemos en casa.
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La ingestión de pilas puede causar síntomas que se confunden fácilmente con los de la gripe. Estas pilas son muy peligrosas si se ingieren, ya que, si se alojan en el esófago, pueden causar quemaduras graves en tan solo dos horas. Si no se tratan, pueden perforar el esófago y causar problemas graves hasta 28 días después de su extracción. Desafortunadamente, en el caso de la niña, la afección fue mortal.
El bisabuelo de la niña dijo que la atendieron de inmediato y tuvieron que someterla a una cirugía de emergencia, pero los médicos no pudieron revertir el sangrado y la niña murió.
El médico que atendió a la niña informó que la pila se había alojado en su esófago y le había causado daños irreversibles. Dado que la había ingerido hacía más de dos horas, esta le causó graves daños en el esófago, a tal punto que los médicos no pudieron hacer nada para revertir la situación, ya que el daño fue demasiado grave y la niña finalmente falleció.
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Los médicos advierten a los padres que tengan mucho cuidado con este tipo de pilas si tienen niños pequeños en casa, ya que estas pilas están presentes en la mayoría de los juguetes infantiles y pueden ser mortales.
